La crisis post-COVID obligará a una reforma integral de las pensiones en 2021
BBVA defiende la renta mínima temporal y alerta de que el paro superará el 20% este año
Las pensiones están aseguradas, aunque los ingresos tributarios caerán unos 40.000 millones este año
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El pago de las pensiones está garantizado, pese a la cuarentena
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El brutal impacto de la crisis económica causada por el coronavirus obligará a efectuar una reforma integral del sistema de pensiones a partir de 2021 de manera inaplazable, debido entre otros factores a la fuerte disminución de los ingresos por cotizaciones sociales que ocasionará la menor actividad empresarial, sobre todo en algunos sectores, y la enorme y prolongada tasa de paro (subirá por encima del 20% este año) con el consiguiente hundimiento de ingresos de la Seguridad Social (@info_TGSS). Esta es una de las principales conclusiones del Servicio de Estudios de BBVA (BBVA Research @BBVAResearch), que este martes ha presentado su informe Situación España.
"Sobre un déficit estructural que ya tiene el sistema de pensiones español, ahora esta crisis nos obligará a abordar los desafíos anteriores más las heridas adicionales que dejará sobre las finanzas de la Seguridad Social. Este año no es el momento de acometer la reforma integral, pero a partir de 2021 será obligatorio, porque es imprescindible asegurar su financiación a medio y largo plazo, y además a España le urge adoptar reformas que incrementen la capacidad de crecimiento de la economía, lo que exige suavizar en el tiempo parte del inevitable esfuerzo fiscal que tendrá que hacerse en el futuro", afirma Rafael Domenech (@rdomenechv), responsable de Análisis Económico de BBVA Research, quien no obstante está convencido de que el pago de las pensiones está garantizado, pese a la importante pérdida de recaudación fiscal que sufrirán las arcas del Estado.
La recaudación tributaria de España se desplomará en unos 40.000 millones de euros, por culpa de la parálisis de la actividad económica y productiva y por las medidas fiscales adoptadas para ayudar a los colectivos más afectados, según sostiene el Consejo General de Economistas-Asesores Fiscales (REAF @REAF_CGE).
En su informe de la situación post-crisis, el Servicio de Estudios de BBVA defiende la utilidad de la renta mínima en estos momentos, para evitar el riesgo de pobreza severa, pero advierte de que "debe ser temporal, hay que diseñarla muy bien y evaluar los costes y efectos no deseados que pudiera tener". Las transferencias a los hogares deben seguir siendo dependientes de la situación de la persona que las reciba e incentivar su participación en el mercado formal de trabajo.
Los expertos alertan asimismo de que la respuesta a los problemas "no puede ser el encarecimiento permanente del despido, sino facilitar acuerdos dentro de la unidad productiva que puedan ayudar a mantener el empleo".
Casi un millón de empleos menos en 2020
La lacra del paro desbocado ensombrecerá España al menos los próximos dos o tres años, a tenor de las previsiones del BBVA, que apuntan a que, para recuperar un nivel de desempleo en el entorno del 13% (nivel previo a la pandemia), habrá que esperar hasta el año 2023, en función de la capacidad económica.
En concreto, los analistas de BBVA Research, cuyo director es Jorge Sicilia, vaticinan una tasa de paro del 20,5% este año y del 17,3% el próximo, como consecuencia de una caída del empleo del 6,9% este año y un repunte del 4,2% en 2021. De aquí a finales del presente ejercicio, "en España se destruirán alrededor de 970.000 puestos de trabajo. El paro lo tendremos en promedio en un 20% este año y en un 17% el próximo”, asegura Miguel Cardoso (@minesoto2003), economista jefe para España de BBVA Research.
Si el mercado laboral se comporta bien, y se reduce el desempleo a razón de 2,3 puntos por año, habría que esperar otros dos años adicionales para volver a registrar una tasa de paro en el entorno del 13%. Es decir, un horizonte de tres años con más del 13% de paro.
La del empleo no será la única caída que sufrirán los indicadores macroeconómicos, ya que el PIB podría sufrir un retroceso medio del 8% este año, además de l merma de cotizaciones y de recaudación por impuestos. Por el contrario, el déficit público se disparará hasta el 11% del PIB (en 2021 podría ser del 6,7%) y la deuda pública se incrementará hasta el 115,8% este ejercicio.
Pactar medidas necesarias durante "muchos años"
El director de BBVA Research, Jorge Sicilia, ve imprescindible llegar a un consenso "amplio" de los partidos políticos y de la sociedad para adoptar las medidas que serán necesarias durante "muchos años", y considera que los avales públicos del ICO, junto con los créditos fiscales del Gobierno, ayudarán a que la caída puntual de los ingresos de las empresas no se convierta en un problema de solvencia para el sistema financiero.
Eso sí, los analistas del banco vasco reclaman volver a la economía de mercado, "porque genera crecimiento y empleo", si bien creen que se regresará tal vez con algo más de intervención del Estado, necesaria en este momento.