Opinión

¡Ay, mis articulaciones!

Ramón Sánchez-Ocaña
Ramón Sánchez-Ocaña

Jueves 6 de mayo de 2021

ACTUALIZADO: Miércoles 23 de junio de 2021 a las 17:29H

4 minutos

 

La mitad de la población tiene al menos una articulación afectada por la artrosis a partir de los 35 años. De hecho, alrededor del 10 por ciento de los adultos presenta artrosis moderada o grave y la incidencia aumenta proporcionalmente con la edad. Según los últimos datos, de los más de 7 millones de españoles que padecen artrosis, el 75 por 100 son mujeres. La mujer, como ya hemos escrito en alguna ocasión, la padece más que el varón. Suele padecer la de rodilla, la más frecuente, junto con la de manos. En los hombres, es más frecuente la de cadera.

El problema  suele mostrarse a partir de los 45-50 años (aunque en determinados casos, por reumatismos, alteraciones genéticas o metabólicas, puede aparecer hacia los 30).

Síntomas

El síntoma básico es el dolor e inflamación en las articulaciones, sobre todo en rodillas, cuello, zona baja lumbar, manos, caderas y pies. Suelen mejorar los síntomas con el reposo y empeorar con el movimiento. Los síntomas son poco importantes en el comienzo y van progresando de manera gradual y lenta.

Sin causa conocida, el cartílago articular envejece antes que todo lo demás. Y cuando se pierde el equilibrio en la restauración de ese cartílago, la superficie de carga empieza a padecer. Hay también un factor hereditario tan claro como inexplicable. Hay también un componente hormonal, porque hay hormonas que actúan sobre el cartílago de dos maneras. O acelerando su maduración, con lo que la destrucción es más temprana; o disminuyendo su actividad metabólica, es decir, su regeneración.

Duele al comenzar el movimiento y luego desaparece. Pero si el movimiento continúa, duele tiempo después. Es en la rodilla en donde mejor se nota. Duele al levantarse. Tras dar unos pasos, desaparece. Pero si se anda mucho, vuelve a aparecer.

Y otro detalle inconfundible de la artrosis, sea de rodilla, sea de cervicales: al poner en juego la articulación, suenan por dentro como arenillas, pequeños crujidos, debidos al roce de los restos del cartílago...

La artrosis en la cadera es tan frecuente en varones como en mujeres. Y en la mayoría de los casos se produce en las dos caderas. Un día cualquiera empieza un dolor hacia la ingle, precisamente cuando se va a iniciar el movimiento. Al levantarse, al subir las escaleras. Muchas veces no duele en la cadera, sino en la ingle, en la rodilla, en el muslo. Una nota característica es que por temor al dolor, va a tratar de dar pasos más cortos. Cruzar las piernas cuando está sentado motiva dolor, como eso de agacharse a ponerse los zapatos o quitarse los calcetines o las medias...

La artrosis de rodilla es una de las más frecuentes, y se produce más en mujeres que en varones. Aparece después de un cierto tiempo de inmovilidad. Y se caracteriza especialmente porque se manifiesta de forma muy clara al bajar escaleras.