Opinión

El enorme riesgo del alcohol

Ramón Sánchez-Ocaña
Ramón Sánchez-Ocaña

Viernes 21 de agosto de 2020

5 minutos

España tiene una de las tasas más altas consumo de alcohol entre los jóvenes y especialmente entre las chicas. Es uno de los pocos países, en donde el nivel de borracheras a los 15 años es mayor entre las adolescentes que entre los adolescentes. (sí, sí, ha leído bien: borracheras a los 15 años).

También en las estadísticas europeas dicen que España, junto con Finlandia, Suecia y Reino Unido, son de los pocos países en donde hay mas bebedoras que bebedores. En general, el consumo de alcohol en jóvenes españoles esta muy por encima de la media europea.

El inicio del consumo de alcohol está en torno a los 13 años. Y a partir de ahí los datos son estremecedores. Por ejemplo: el alcohol es el responsable directo de mas de 8.500 muertes al año. En el 37% de los accidentes de tráfico mortales, el conductor presenta ingesta elevada de alcohol. Se trata de la tercera causa de enfermedad (9,2%), después del tabaco (12%) y la hipertensión arterial (10%). En el 60% de los casos de violencia de género, el agresor ha consumido alcohol como sustancia que facilita desinhibir la conducta. Y el 33% de los adolescentes que acude a la consulta del médico de familia se ha emborrachado en el último mes.

Casi millón y medio de españoles mayores de 16 años tiene problemas con el alcohol; o, dicho de otra forma: seis de cada cien españoles tiene dependencia alcohólica en mayor o menor grado. Eso supone que cinco  grandes hospitales dedicados exclusivamente a los ingresos y tratamiento de alcohólicos serian insuficientes, ya que todos los años se producen 165.000 asistencias por este problema. Cuatro de cada cien españoles dice que se emborracha por lo menos una vez a la semana. Y 6 de cada 10 mayores de 16 años reconoce que bebe de manera habitual.

El alcohol daña mas a la mujer

Y hay que insistir en que el alcohol daña más a la mujer; es mas susceptible a los efectos nocivos del alcohol. Ella tiene un daño hepático mas severo que el varón. Si una mujer bebe las mismas cantidades que un varón, su sangre absorberá entre un 30 y un 50% más. Se sabe también que el corazón de una mujer es dos veces más vulnerable que el del varón ante los efectos del alcohol. Ellas necesitan un 60% menos de alcohol para sufrir la misma cardiopatía. Y todo porque además de disponer de menor enzima gástrica que es la que metaboliza el alcohol, tiene mas grasa, lo que facilita la absorción.

Si estas embarazada, ni una copa

Rotundo: ni una copa. Consumir alcohol durante el embarazo puede causar deformidades físicas y psíquicas en el feto y que son, en su mayor parte, irrecuperables. El problema grave es que como depende de la susceptibilidad del feto y de su momento de formación, no se puede hablar de dosis mínimas. Toda bebida alcohólica es, en principio, peligrosa. Es lo que se ha llamado embriofetopatía alcohólica o síndrome alcohólico fetal. Y es que, como dice el Prof. Alonso-Fernández en su magnifico libro Los secretos del alcoholismo (Ed. Libertarias) el alcohol atraviesa sin dificultades la barrera placentaria y penetra en la sangre del embrión o del feto alcanzando la misma concentración que en la sangre materna.

El alcohol ingerido por la madre durante la gestación causa alrededor del 20% de todos los retrasos mentales.

Si ha bebido de mas...

Si alguien de su entorno ha bebido de mas, debe:

  • Tratar de provocar el vómito para expulsar la posible bebida que le quede en el tubo digestivo y que todavía no ha sido metabolizada.
  • Tumbar al intoxicado sobre un lado para que no haya peligro de que pueda aspirar algún resto de lo vomitado y atragantarse. Una vez provocado el vómito se le puede dar alguna bebida con mucho contenido en azúcar.
  • Abrigar al intoxicado y si llega a perder la conciencia debe acudir rápidamente a un centro sanitario.

No debe darle a beber leche o cualquier otra cosa que tenga grasa, porque puede facilitar la absorción del alcohol. Es inútil, intentar que ande, que pasee, que se mueva.

Y la resaca

Se han dado recetas de todo tipo para contrarrestar los afectos de la bebida. La mejor sin duda, es acordarse de que “no se debe calentar la boca” y saber frenar. Pero si al día siguiente se padecen las molestias típicas de la resaca, lo mejor es comer algo caliente, tomar un analgésico para el dolor de cabeza y acostarse.

Hay quien sostiene -y debe decirse- que todos los síntomas de la resaca provienen del síndrome de abstinencia; es decir que el organismo quiere más alcohol, y por eso aconsejan una cerveza. Volver a beber no es la solución. Seria retrasar la incomodidad y agravar todo el cuadro.